El año escolar para los 175 niños que acuden al centro de educación básica general Lluvia de Bendiciones, en el distrito de Arraiján, inició con la carencia de agua potable, un problema que suma ya varios años.
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La falta del vital líquido en esta comunidad es padecida por los pobladores desde hace 20 años siendo difícil el suministro a través de carros cisterna a causa del mal estado de la vía.
Según los docentes, para abastecer los dos tanques de reserva con que cuenta la escuela, los pobladores han instalado tuberías desde diversos sectores de Lluvia de Bendiciones.
Buscan soluciones reales a los problemas de la comunidad
Esta situación dificulta la limpieza de las aulas de clases y el funcionamiento de los sanitarios; además de verse obligados los niños a traer agua de sus casas.
Próximo al poblado de Lluvia de Bendiciones, existe un tanque de reserva, en el cual se desperdicia el agua debido a un mal funcionamiento del sistema de válvulas de cierre.
El pasado 22 de marzo, la comunidad educativa del centro de educación básica genera Lluvia de Bendiciones, realizó una marcha hasta el punto en donde se ubica el tanque de reserva, reclamando el suministro regular de agua potable.
Personal del Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (Idaan), efectuó una revisión del tanque de reserva.
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Para abastecer de agua potable a los cuatro sectores en que está dividida Lluvia de Bendiciones, el Idaan mantiene un plan de sectorización y pozos que operan con turbinas.
Una de estas turbinas, ubicada en el sector dos, se encuentra fuera de operación debido a los daños sufridos a consecuencia de la caída de un poste de tendido eléctrico.
